Los lienzos de Antonio Murado
son hazañas de virtuosismo técnico, que demuestran su facilidad con la
pintura y la capacidad para crear obras que son a la vez abstractas y
figurativas. Desde la distancia, este nuevo conjunto de trabajos parece
acercarse al realismo fotográfico, pero cuando se mira más de cerca las
imágenes de paisaje rural se disuelven por completo. Murado está
interesado en la idea de que nuestro ojo busca formas reconocibles, la
búsqueda de una narración visual donde sólo hay pinceladas.
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DBP 2, 2013. Óleo sobre lienzo |
Varias
de las nuevas pinturas incluyen un bloque sólido de color brillante que
está en contraste con la sutileza y la profundidad del resto de la tela
—una continuación del interés de Murado en la yuxtaposición del
movimiento con la quietud y la transparencia con la solidez—. Estas
bandas audazmente intensas interrumpen la sugerencia de la pintura de
paisaje del siglo XIX, combinando la tradición y la innovación para
sorprender y cautivar.
Lake, 2013. Óleo sobre lienzo.
Murado
ha expuesto a nivel internacional desde hace más de dos décadas. Su
trabajo está en muchos de los principales museos españoles y en
importantes colecciones públicas y privadas de Europa y Estados Unidos.
Sobre sus pinturas se ha escrito extensamente en España y numerosas
publicaciones han revisado su trabajo en Estados Unidos, incluyendo
ArtForum y The New York Times. Nacido en Lugo, actualmente reside y
trabaja en Nueva York.
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Lake, 2013. Óleo sobre lienzo. |
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